UN COSTALERO PARA LOS LIBROS Y LA HISTORIA DE SEVILLA, ANTONIO SALES "LA HEIDI".

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Aquí me quedo sin palabras, porque son tantas las vivencias a su lado que no tendría tiempo en esta noche de terminarlas.... un maestro, un amigo, un costalero de verdad, un hombre al que su padre le dijo un día que jamás una mala persona seria un buen costalero, un compañero que siempre tuvo el respeto, el cariño y la admiración de todo aquel que tuvimos el honor de trabajar las cofradías con el, años que me vienen a la memoria y de todo me encuentro, desde aquellos cabezazos a las columnas antes de meterse debajo del Soberano Poder y Pepe Montero (el camello) aguantándole las envestidas...., cuantos años de disfrutar en el Barrio león escuchando a La Heidi, esos años en Los Servitas terminando la semana santa de forma memorable, aquellos años duros en Los Panaderos pero que siempre quedaran grabados en mi memoria, aquel andén del ayuntamiento de no me acuerdo que año de hace ya una jarta y que fue simplemente de lo mejor que he vivido en mi vida, impresionante!!!!, esos años de Herodes donde terminábamos en el "pájaro verde" y sus palabras, sus consejos, esa forma suya de sentir con tanta pasión las cofradías, fue en las cofradías (y lo sigue siendo, porque en las cofradías como en el toreo se es costalero y torero aunque te retires) un líder, un ídolo, pero sobre todas las cosas, un costalero honrao y un buen amigo, aquellos años de los tres tenores en la cuadrilla de Paco Arnaiz donde estaban Bienve, La Heidi y El Pollero, para vivirlos.... su incondicional amigo Fran Narbona, el que siempre recordaba una levantá a los cielos para una niña llamada Marta que desde las ventanas celestiales miraría a su padre con felicidad y orgullo, ¿que grandes levantás por Martita verdad Antonio?, un enamorao de San Gonzalo, del Soberano Poder, su Cristo y su casa, su hermandad y su vida, un niño de Juan Vizcaya, años para el recuerdo de toda una vida en San Gonzalo, un profundo cariño de años de amistad y sudor en la trabajadera con Bienve, un comportamiento ejemplar durante toda su vida con Manolo y Carlos Villanueva, capataces de su cuadrilla del Herodes que con tanto honor y orgullo tuvo siempre en su boca como el mejor exponente de una cuadrilla de costaleros y el saber hacer de unos capataces en el martillo, su cariño por siempre a Manolito Garduño recordando aquellos años de fatigas pero brillantes que quedaran forjados a fuego en la retina de quien lo trabajaron, su disciplina como costalero, que bien podría ser una tesis de nuestros días para muchos que empiezan.... se llama Antonio Sales Trillo y en las cofradías La Heidi, y es un alto orgullo haber aprendido y trabajado con el, gracias Antonio, sabes que nunca se olvidara tu legado, un costalero de verdad, un tío, un amigo. Que Dios te bendiga Antonio. Gracias por existir en las trabajaderas.